05 octubre 2008

Malos con premio: Judas

Me proponía recorrer la historia de los "buenos castigados", pero un lector del blog me ha sugerido mejor hacer una lista de ejemplos contra ejemplares, buscando los casos inagotables de "malos con premio". Con algo de mala uva, podríamos comenzar con algún político español contemporáneo (cada uno según sus fobias), pero eso es tan fácil (así se las ponían a Fernando VII) que vamos a descartar al governo ladro de momento. ¿Por qué no empezar por Judas, el malo malísimo por antonomasia? Así relata el evangelista Mateo la traición (y el arrepentimiento):

"Entonces uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue donde los sumos sacerdotes, y les dijo: «¿Qué queréis darme, y yo os lo entregaré?» Ellos le asignaron treinta monedas de plata. Y desde ese momento andaba buscando una oportunidad para entregarle. [...] Entonces va Jesús con ellos a una propiedad llamada Getsemaní, y dice a los discípulos: «Sentaos aquí, mientras voy allá a orar.» [...] ¡Levantaos!, ¡vámonos! Mirad que el que me va a entregar está cerca.» Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los Doce, acompañado de un grupo numeroso con espadas y palos, de parte de los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo. El que le iba a entregar les había dado esta señal: «Aquel a quien yo dé un beso, ése es; prendedle.» Y al instante se acercó a Jesús y le dijo: «¡Salve, Rabbí!», y le dio un beso. Jesús le dijo: «Amigo, ¡a lo que estás aquí!» Entonces aquéllos se acercaron, echaron mano a Jesús y le prendieron. Llegada la mañana, todos los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo celebraron consejo contra Jesús para darle muerte. Y después de atarle, le llevaron y le entregaron al procurador Pilato. Entonces Judas, el que le entregó, viendo que había sido condenado, fue acosado por el remordimiento, y devolvió las treinta monedas de plata a los sumos sacerdotes y a los ancianos, diciendo: «Pequé entregando sangre inocente.» Ellos dijeron: «A nosotros, ¿qué? Tú verás.» El tiró las monedas en el Santuario; después se retiró y fue y se ahorcó. Los sumos sacerdotes recogieron las monedas y dijeron: «No es lícito echarlas en el tesoro de las ofrendas, porque son precio de sangre.» Y después de deliberar, compraron con ellas el Campo del Alfarero como lugar de sepultura para los forasteros. Por esta razón ese campo se llamó «Campo de Sangre», hasta hoy." (Mt, 26-27).

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13 comentarios:

  1. No sé si ha llegado el anterior comentario,tengo problemas con Blogger.
    Decía que no sabía bien el final de la historia, desconocía que ese dinero fue utilizado de esa forma.Apuntaba que el Judas de hoy no se arrepiente, te vende, te sonríe,y o asciende o cobra,pero no hay atisbo de arrepentimiento. La traición se llama "aprovechar una oportunidad". No sé si 30 monedas de plata era mucho dinero entonces, para mi lo malo no está en la cantidad pactada, y a todo esto... ¿Por qué "con premio"?

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  2. No se arrepintió: Se desesperó, el desgraciado.

    Que el Señor nos libre!

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  3. Imagino que Judas habrá dado mucho juego literario. No sé si podrías ilustrarnos al respecto...

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  4. Mary White ha hecho una precisa lectura contemporánea de Judas, "el que aprovecha las oportunidades".

    Terzio, no se arrepintió, pero se vio acosado por el remordimiento.

    Enrique, la primera versión literaria que he recordado, son las "Tres versiones de Judas", un cuento de J.L. Borges, que releído ahora me ha decepcionado.

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  5. Y también:

    Francisco de Quevedo, Política de Dios y gobierno de Cristo, 2ª parte, capítulo VII, "De los acusadores, de las acusaciones y de los traidores".

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  6. Bien lejos te has ido para buscar ejemplos, amigo Joaquín..........

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  7. Amigo, es que de las fábulas, mitos, leyendas e historias antiguas es de donde hay que tomar los ejemplos (y los contra ejemplos), no de nuestros contemporáneos. Nihil novum sub sole.

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  8. L'Òpera del Tradimento (en español se editó con el título de "La ceremonia de traición"=, de Mario Brelich, interesante y bien desenvuelta, aunque novela al fín.

    Personalmente, prefiero - quizá entre todo lo que se ha escrito con valor literario sobre el tema/personaje - la semblanza de Gabriel Miró, que empieza con Judas su galería de Figuras de la Pasión del Señor, tan bella. Ese capítulo 1º sobre Judas termina con una frase inolvidable.

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  9. Hola Joaquín,

    Una de las razones por las que me gusta acercarme por tu blog es la posibilidad de encontrarme estos latines: Nihil novum sub sole.

    ¿Por qué dejaríamos de hablar así?

    Y eso que en biología todavía algunos lo hacen. Mira: Ommnis ovo ex ovo, Omnis cellula ex cellula.

    ¿Podríamos pensar también Omnis stultitia ex stultitia?

    No sé, últimamente encuentro tu blog inspirado,....

    Un abrazo,
    E

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  10. Poco premio es el de Judas

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  11. Anónimo, ¿poco premio, treinta monedas? Para Judas fue bastante, para entregar al Rabbí.

    Terzio, oportuno ese recuerdo de la recreación de Gabriel Miró.

    Emilio, es verdad que el recursos a refranes, frases proverbiales, etc. revela pereza mental. Seguramente ése sea mi estado, en estos días...

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  12. Qué va Joaquín, si de verdad que te lo decía encantado por tus latines. Ánimo y sigue que algo aprenderemos,....

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  13. Emilio, eso de tener un latín en la boca es deformación profesional. Lo primero que estudia un neófito del derecho (cupida legum iuventus) es el derecho de Roma; con la diferencia de que el derecho romano es una "verdad eterna" (el derecho se inventó de una vez, y sólo evoluciona en la epidermis).

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