02 diciembre 2009

Los nombres y los significados

Las palabras son importantes. Cuando se comenta un texto de ideas, como puede ser la encíclica Caritas in veritate, lo primero es ponerse de acuerdo sobre el significado de los términos que se emplean, v.gr.: caridad, amor, verdad. Esto supone rastrear también el origen o genealogía de las palabras, su etimología y sus equivalencias en otras lenguas (originales o de traducción). Mientras reflexiono sobre la próxima entrada, en que continuaré mi comentario y polémica sobre la encíclica, estoy leyendo algo de la Suma Teológica de Santo Tomás de Aquino. Es una lectura recomendable para aguzar las ideas y la expresión verbal.

Yendo y viniendo de una pregunta a otra de la Suma, me he encontrado esta tarde con un texto tan sugerente, que no me resisto a copiarlo (en latín y castellano) y compartirlo con los amigos y amigas que se asomen a este blog. Creo que el Aquinate ilustra mejor que nadie el método léxico que defiendo. Se encuentra en la primera parte,
quaestio 79, articulus 10 ("utrum intelligentia sit alia potentia ab intellectu"):

Hoc nomen intelligentia proprie significat ipsum actum intellectus qui est intelligere. In quibusdam tamen libris de Arabico translatis, substantiae separatae quas nos Angelos dicimus, intelligentiae vocantur; forte propter hoc, quod huiusmodi substantiae semper actu intelligunt. In libris tamen de Graeco translatis, dicuntur intellectus seu mentes. Sic ergo intelligentia ab intellectu non distinguitur sicut potentia a potentia; sed sicut actus a potentia.

"La palabra inteligencia propiamente significa el acto del entendimiento consistente en entender. No obstante, en algunos libros traducidos del árabe, se llama inteligencias a las sustancias separadas que nosotros llamamos ángeles. Tal vez esto es así porque dichas sustancias siempre entienden en acto. En algunas traducciones del griego, son llamados Entendimientos o Mentes. Por lo tanto, la inteligencia no se distingue del entendimiento como una potencia de otra, sino como el acto se distingue de la potencia." [
S. Th. 1, q.79, a.10].

Por curiosidad, obsérvese que la traducción castellana (que ofrece un blogger argentino) pierde la familiaridad léxica de intelligentia, intellectus, intelligere, cuando interpone los términos 'entendimiento' y 'entender', donde iría tal vez mejor 'intelecto' e 'inteligir'.

.

2 comentarios:

  1. Esto empieza a ser digno de publicarse en una revista especializada.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Gracias, mi Capitán, aunque yo lo veo más sencillo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar