El pasado miércoles 24 de agosto, en la ciudad inglesa de Liverpool, un niño de 11 años, Rhys Jones, murió de un disparo de arma de fuego, a manos de otro menor de edad [BBC]. El Primer Ministro británico Gordon Brown ha asegurado tajantemente que los responsables del crimen serán perseguidos, detenidos y castigados. Una afirmación muy valiente: nada de presuntos culpables, no: los culpables serán castigados (punished). El líder tory David Cameron también ha ofrecidos sus puntos de vista para combatir la criminalidad de los menores de edad: su país necesita un nuevo pacto social que comprometa a los ciudadanos en la seguridad pública. Eso pasa por que no se venda alcohol a menores de edad, y por que la industria del ocio sea más responsable en sus contenidos.
En Francia acaban de rebajar la mayoría de edad penal a los 16 años (si bien el juez tendrá que motivar su decisión). Era una promesa de Sarkozy (que está cumpliendo la mayoría de ellas). En España vamos exactamente en la dirección contraria (la nefasta Ley del Menor, ¡aprobada por el PP!). Algún día habrá que contabilizar las víctimas generadas en los últimos 20 o 30 años por el "progresismo penal" (me refiero a las víctimas de delincuentes prematuramente puestos en libertad, o que ni siquiera llegan a ser encarcelados, gracias a nuestras "humanitarias" leyes penales). El "progresismo penal" se basa en el principio de que el delincuente no es realmente responsable de sus actos (la culpable es "la sociedad"). En España sigue siendo dogma (ni el PP se atreve a cuestionarlo). En Francia están revisando ese tabú.
ResponderEliminarEspero que hayas pasado un buen verano, Joaquín. Cordialmente, CURRO CONTRERAS.