28 enero 2008

En Mauritania

MM* me envia por email algunas fotos tomadas en Mauritania. Me da libertad para publicar alguna que me guste en el majao público. Me inclino por escoger la de un lector de una biblioteca coránica de la ciudad caravanera de Shinquit, o Chinguetti. Cualquier lector de Santo Tomás de Aquino, que hoy celebramos, no ignora cuánto debemos a judíos, persas y árabes en la preservación del legado filosófico antiguo. La historia está hecha de infortunios, guerras y destrucciones, pero también de una misteriosa continuidad de saberes e ideas. Por eso las bibliotecas, los lugares que encierran los antiguos saberes escritos, nos parece que tienen un halo de santidad y ciencia, y son el refugio de los libros sagrados.

3 comentarios:

  1. ¿ Dónde mejor que en una librería o una biblioteca?.
    Aparte del Sagrario, en lo mundano es de los sitios en los que encuentras más paz y poder disfrutar de dar alas a tu curiosidad.

    Me llama la atención tu sentido de la Historia como evolución.Me recuerda bastante al concepto de Ortega.

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  2. Es digno de estudio que las religiones (al menos, las "religiones del Libro") veneran ritualmente sus libros sagrados.

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  3. Buena observación.
    No en vano eran los monges los que formaban las escuelas de traductores y copistas.Gran parte de la antugëdad clásica nos vino por ellos.

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