21 diciembre 2010

Idea y vivencia de la filosofía


"Voy a dar un ejemplo para que comprendan bien lo que es la «vivencia». El ejemplo no es mío, es de Bergson.

"Una persona puede estudiar minuciosamente el plano de París; estudiarlo muy bien; notar uno por uno los diferentes nombres de las calles; estudiar sus direcciones; luego puede estudiar los monumentos que hay en cada calle; puede estudiar los planos de esos monumentos; puede repasar las series de las fotografías del Museo del Louvre, una por una. Después de haber estudiado el plano y los monumentos, puede este hombre procurarse una visión de las perspectivas de París, mediante una serie de fotografías tomadas de múltiples puntos de vista. Puede llegar de esa manera a tener una idea regularmente clara, muy clara, clarísima, detalladísima de París. Esta idea podrá ir perfeccionándose cada vez más, conforme los estudios de este hombre sean cada vez más minuciosos; pero siempre será una mera idea.

"En cambio, veinte minutos de paseo a pie por París, son una vivencia.

"Entre veinte minutos de paseo a pie por una calle de París y la más larga y minuciosa colección de fotografías, hay un abismo. La una es una mera idea, una representación, un concepto, una elaboración intelectual; mientras que la otra es ponerse uno realmente en presencia del objeto, esto es: vivirlo, vivir con él; tenerlo propia y realmente en la vida; no el concepto que lo substituya; no la fotografía que lo substituya; no el plano, no el esquema que lo substituya, sino él mismo.

"Pues, lo que nosotros vamos a hacer es vivir la filosofía. Para vivirla es indispensable entrar en ella como se entra en una selva; entrar en ella a explorarla."

Manuel García Morente: Lecciones preliminares de filosofía. Curso dictado en la universidad de Tucumán (1937). [Ediciones Encuentro].

Imagen: García Morente en su despacho de la Ciudad Universitaria [UCM].

2 comentarios:

  1. Magnífico principio para un libro. Si el resto está a la altura, hay que leerlo.

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  2. Desde luego, es un gran libro (o mejor, lecciones orales tomadas al dictado). Muy recomendable de García Morente, también, su "Hecho extraordinario", publicado póstumo.

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