No olvido que aún tenemos pendiente una quaestio disputata... A modo de distensión, os quiero contar mis impresiones de una película que me ha fascinado, y que he disfrutado como un enano, Ratatouille. El protagonista es la rata Rémy (ahí lo tenéis en la foto de arriba, entre cacharros, preparando una receta de cocina).
Andaba yo caviloso con este asunto de la inmortalidad del alma, y mientras veía la película iba cayendo en la cuenta de los numerosos guiños filosóficos que contiene. Está muy bien pensada, muy bien contada. Rémy no es una rata cualquiera. Le disgusta robar y roer basuras, como hacen su hermano y las demás ratas de su colonia. Rémy es un gourmet que paladea los manjares que se procura a hurtadillas de la cocina de la casa. Diríamos: tiene en su naturaleza un principio que aspira a una vida superior a la de simple rata.
En la película hay también un ángel tutelar, y una terrible escena en que el padre de Rémy le enseña el destino mortal de todas las ratas. Se reflexiona también sobre los imposibles lazos de amistad entre ratas y humanos, que Rémy supera con decisión (la caridad todo lo puede). Todavía podrá verse en la película una metáfora sobre la mente como piloto que gobierna la nave del cuerpo...
Ratatouille tiene todos los adobos de una gran película: un viaje iniciático, una historia de aprendizaje, intrigas, rivalidades, persecuciones y carreras, amistad, romance, enseñanzas sobre el valor de la lealtad y la confianza... ¿Qué más queréis que os diga? Pues que vayáis a verla y la disfrutéis...
Andaba yo caviloso con este asunto de la inmortalidad del alma, y mientras veía la película iba cayendo en la cuenta de los numerosos guiños filosóficos que contiene. Está muy bien pensada, muy bien contada. Rémy no es una rata cualquiera. Le disgusta robar y roer basuras, como hacen su hermano y las demás ratas de su colonia. Rémy es un gourmet que paladea los manjares que se procura a hurtadillas de la cocina de la casa. Diríamos: tiene en su naturaleza un principio que aspira a una vida superior a la de simple rata.
En la película hay también un ángel tutelar, y una terrible escena en que el padre de Rémy le enseña el destino mortal de todas las ratas. Se reflexiona también sobre los imposibles lazos de amistad entre ratas y humanos, que Rémy supera con decisión (la caridad todo lo puede). Todavía podrá verse en la película una metáfora sobre la mente como piloto que gobierna la nave del cuerpo...
Ratatouille tiene todos los adobos de una gran película: un viaje iniciático, una historia de aprendizaje, intrigas, rivalidades, persecuciones y carreras, amistad, romance, enseñanzas sobre el valor de la lealtad y la confianza... ¿Qué más queréis que os diga? Pues que vayáis a verla y la disfrutéis...
Tengo unos prejuicios enormes con las películas de animación de ahora, pero tomo buena nota de tu recomendación para este fin de semana.
ResponderEliminarNo te arrepentirás. Y luego cuéntalo (desde una perspectiva clásica).
ResponderEliminarSaludos
Sí, seguro que es divertida; a ver si la veo.
ResponderEliminarPero confieso que me he plantado en las "clasicas" de Disney, y no paso del Libro de la Selva...y poco más.
.-
No llegué a tiempo a la disputatio tomista. No he visto "Ratatouille" (mi hijo sí). Quizás me anime después de leer esto. Otra película sobre anhelos de inmortalidad es la inolvidable "Blade Runner". Por cierto, creo que el cine de animación es lo mejor del Hollywood actual. Atención a "Los increíbles": divertidísima, entrañable, y también con su carga filosófica (un aire como a Ayn Rand en lo de la defensa deL individuo y del "derecho a la excelencia" ... aunque también hay un mensaje claro de vindicación de la familia). CURRO.
ResponderEliminarEl próximo capítulo de la "disputa blogoscolástica" quiero que sea el "alma subsistente".
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Esta película superó con creces cualquier expectativa que pudiera tener. Me pasaba lo mismo que a Juan Manuel Macías. Pero todo lo que dices es acertado en la interpretación de esta gran película. Una película que pocos niños pueden entender en su totalidad pero que sin duda alberga de forma sumamente elaborada un buen mensaje.
ResponderEliminarUn saludo.