19 septiembre 2007

La sabiduría del elefante

"El simbolismo de este animal tiene cierta complejidad y determinaciones secundarias de carácter mítico. En el sentido más amplio y universal, es un símbolo de la fuerza y de la potencia de la libido. En la tradición de la India, los elefantes son las cariátides del universo. En las procesiones, son la montura de los reyes. Es muy interesante que, por su forma redondeada y su color gris blanquecino, se consideran símbolo de las nubes. Por los cauces del pensamiento mágico, de esto se sigue la creencia en que el elefante puede producir nubes y de ahí la mítica suposición de la existencia de elefantes alados. La línea elefante, cima de monte, nube, establece un eje del universo. Probable derivación de estos conceptos de clara impronta primitiva, el uso del elefante en la Edad Media como emblema de la sabiduría, de la templanza, de la eternidad e incluso de la piedad."

Juan Eduardo Cirlot,
Diccionario de símbolos, "Elefante"

14 comentarios:

  1. Gracias, Joaquin, por esta entrada.

    Como te decía, yo estoy aquí por el elefante, cuantos más post de elefantes vayas poniendo, más visitará este romano tu blog. Porque, Casualmente, cuando aterricé el otro día en la entrada anterior, venía yo de otro blog en el que distinguía entre creencia esoterica y exoterica. Y precisamente lo ilustraba con el ejemplo del elefante: Serás exotérico si te cuentan que los elefantes son las cariátides del Universo y te lo crees me decían. Puede ser.

    Miro a mi alrededor y sólo veo exotéricos.

    Además, cómo puede ser el elefante símbolo de sabiduría, de la templanza, de la eternidad e incluso de la piedad sin serlo de la memoria. ¿Acaso no es la memoria la fuente de todo?.

    Tú me dirás. Del dualismo ya hablamos otro rato, si puede ser también a la sombra de un elefante.

    Salu2 ;-).

    Aemilius (in Helmantica)

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  2. La distinción entre lo esotérico y lo exotérico está en el fondo de la sabiduría, hasta el punto que se puede leer en los mismos Evangelios (la verdad ocultada a los sabios y descubierta a los sencillos).

    En un principio esas voces quieren decir lo que un maestro enseña de puertas adentro, a los discípulos (lo esotérico), o de puertas afuera (lo exotérico) a la gente corriente, al público.

    Pero el saber esotérico es un fraude: si existe una verdad que se nos oculta, no podrá conocerse ni imaginarse, y sólo podemos con la sóla razón concebirla o sospecharla. Quien presuma poseer saberes ocultos está engañándonos, porque desmiente la experiencia (no se puede saber el fondo de las cosas con seguridad).

    En filosofía se habla de paradojas, aporías, problemas, incompletud, dualismo, ideas contraintuitivas... Todas estas nociones apuntan a lo mismo: que nuestra mente está limitada.

    Sin embargo yo creo firmemente que la providencia ha regalado al hombre los símbolos y las revelaciones, que nos expresan de forma enigmática, entre luces y sombras, algo de la verdad.

    En cierto modo, en el estado presente en que vivimos encarnados en cuerpos físicos, estamos todos condenados a ser "exotéricos".

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  3. "Símbolos, revelaciones, algo de la verdad ...". ¿Por qué Dios no habla claro, de una vez por todas? ¿Por qué juega a esconderse? ¿Cómo puede permitir que tantos hombres no le conozcan? No sé si tiene que ver con el tema, pero hoy estoy en plan sinceridad a tumba abierta, sin temor a la extemporaneidad. Y conste que me tengo por creyente. Pero creyente agónico, unamuniano, torturado por estas dudas. CURRO.

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  4. Tu definición de exoterico y esoterico creo que, a diferencia de la que veíamos el otro día, coincide con la de Platón. La acepto.

    A partir de aquí, sin embargo, o no entiendo nada o me temo que podamos coincidir poco.

    Si tomo esoterico en sentido restringido refiriéndome a grandes verdades, vale. Pero este no es el caso. Si lo tomo en sentido amplio, es decir, lo propio de un grupo de indivíduos, como parece ser el sentido en Platón y el que tu dices, casi todo el saber va haciéndose más y más esotérico. La verdad de la medicina está oculta a los que no son médicos, pero los médicos no saben hacer puentes, p.e. Si me dices que exotérico significa comprobado, entonces te has cargado todo el resto. Todo el saber deberá haber sido, por definición, un día u otro comprobado.

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  5. En realidad, Emilio, creo que todo conocimiento científico debe calificarse de "exotérico", es decir, comunicable. Aún más, creo que es el único saber que podemos descubrir por la razón.

    Los saberes que se nos ocultan o están velados a nuestra mirada, los "esotéricos", son los que se aparecen cifrados en un símbolo o una revelación. El riesgo de todo símbolo o revelación es que puede ser interpretado arbitrariamente, porque no es comprobable.

    Y Curro: si creer fuera un asunto evidente y manifiesto (como ahora estoy mirando mi mano tecleando) todos creerían (eso dice Stº Tomás, contestando el argumento de San Anselmo).

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  6. "Si la existencia de Dios fuese manifiesta, todos creerían". Bien, ¿y qué tendría eso de malo? ¿No sería precisamente lo deseable, desde el punto de vista de Dios? ¿En qué forma puede servir a Dios -o al hombre- el que la existencia divina sea, como mucho, conjeturable o esperable, pero no demostrable? El filósofo de la religión J.L. Schellenberg sostiene que un Dios bondadoso se habría revelado inequívocamente a sus criaturas (no entre tantas brumas). Ergo, Dios no existe (pues, si no es bondadoso, no es Dios). El libro: "Divine Hidenness and Human Reason", Cornell University Press. Paul K. Moser le da una respuesta interesante en un ensayo titulado "Cognitive Idolatry and Divine Hiding", pero esa ya la cuento otro día. CURRO.

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  7. Apenas hemos comenzado a indagar sobre el hombre, y ya nos vamos a elevar a Dios: inevitable. Me atrevería a distinguir entre lo evidente y lo manifiesto: Dios no es evidente (no se impone a la razón: non est per se notum) pero se manifiesta en la creación, incluída nuestra mente. Este asunto daría para largo.

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  8. Por cierto, Curro, qué manía tienen estos "religion philosophers" en pretender que Dios piense igual que nosotros. Sobre la infinita bondad poco podemos decir los seres finitos. El refrán: "quien bien te quiere te hará llorar", ¿cómo se traduciría para un ser infinitamente bondadoso?

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  9. Estoy de acuerdo contigo, Joaquín, en que el conocimiento esotérico es un fraude. Desgraciadamente, es lo que se lleva ahora, aunque supongo que la atracción de lo esoterico es un mal cíclico que se ha dado en todo tiempo y todo lugar.

    Por otra parte, me está interesando últimamente mucho el conocimiento místico, entre otras cosas por sus concomitancias con la poesía.

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  10. Gracias, Juan Manuel, y a todos, porque me estáis dando ideas para seguir un hilo de temas.

    Uno de los últimos libros de Raimon Panikkar me parece muy recomendable: "De la mística" (Ed. Herder, 2006). Tomando ideas de la sabiduría hindú, R. Panikkar defiende el "no dualismo" (superación de las tesis antagónicas monismo/dualismo en la que nos debatimos los occidentales).

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  11. Ortega abominaba de místicos y esotéricos; exigía luz, exoterismo, inteligibilidad, comunicabilidad. Transcribo un párrafo memorable de su "defensa del teólogo frente al místico": "Mas he aquí que al llegar a la última morada, a la cima del Carmelo, al último escalón, el místico guía nos dice: "Ahora quédese usted ahí solo; yo voy a sumergirme en el éxtasis. A la vuelta le contaré a usted". Dócilmente esperamos ilusionados con la perspectiva de ver al místico retornar ante nuestros ojos directamente del abismo, chorreando aún misterios [...]. Helo aquí que ya vuelve; se acerca y nos dice: "Pues, ¿sabe usted que no puedo contarle nada o poco menos, porque lo que he visto es en sí mismo incontable, indecible, inefable?". Y el místico, tan locuaz antes [en la descripción de las primeras "moradas", de las fases preliminares del ascenso espiritual], tan maestro del hablar, se torna taciturno en la hora decisiva, o lo que es peor todavía, nos comunica del trasmundo noticias tan triviales, tan poco interesantes, que más bien desprestigian al más allá. [...] Comprendo, pues, perfectamente y comparto la falta de simpatía que las Iglesias han mostrado siempre hacia los místicos. [...] Me parece que cualquier teología nos transmite mucha más cantidad de Dios, más atisbos y nociones de la divinidad que todos los éxtasis de todos los místicos juntos". CURRO.

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  12. Vaya con Ortega... Estemos o no de acuerdo con sus ideas, hay que reconocer en Ortega y Gasset a un gran provocador de pensamiento, y además expresado (siempre me lo ha parecido) con ese particular "desgarro" de los madriles.

    Sed contra, dice Raimon Panikkar: "la experiencia de la Vida podría ser la definición más breve de la mística... De ahí que la mística no sea el privilegio de unos cuantos escogidos, sino la característica humana por excelencia. El hombre es esencialmente un místico" (ed. cit. pág. 19).

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  13. Absurdo! Pero este es uno de los atributos de los Pániker, tan postmodernos, tan cómodos (y acomodados) en la mêlé oriental-occidental y/o viceversa,(sorry por la irrupción).

    Sobre el elefante: Creo recordar que no es un animal "figura" de Cristo (cfr. el imprescindible Charbonneau); pero sí en cambio su "meollo" el marfil, repelente del pecado y precioso continente de la gracia y la virtud - Turris Ebúrnea-

    Sobre la Revelación de Dios: El problema para "saberla" no es Él (que sí se ha revelado), somos nosotros (que no la recibimos).

    +T.

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  14. Lo que no sé es sí Pániker sigue ejerciendo de sacerdote (no creo que sea una pregunta chismosa).

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